El amor por los demás
David fue pastor de ovejas, compositor musical, soldado, esposo, padre y capitán del ejército, todo esto después de haber sido ungido para ser rey.
Lo que observo es que David no usaba su llamado como un pretexto para dejar de ser parte del pueblo en diferentes acciones.
Yo creo que Dios pone en nuestro camino situaciones en las que a veces no tienen nada que ver con nuestro llamado, solo con el fin de ayudarnos a mantener un corazón de siervo.
Que importante es estar atentos a Su voz para no menospreciar esas oportunidades, y así reflejar a Jesús con nuestro servicio.
¿Será que nosotros estamos acomodándonos a algo?
¿No será que Dios nos quiere llevar a un lugar de mayor influencia para bendecir a otros?
No hay mayor fuerza motivadora e inspiradora que el amor por las personas.
«El perfecto amor hecha fuera el temor» 1 Jn.4:18.

